Gráficos realistas y un juego emocionante.
Te despiertas en una habitación de hotel, solo. Todas las puertas y ventanas están cerradas. Estás llamando a la puerta y diciendo "¡Déjame entrar! ¡Por favor!" mientras hay monos espeluznantes afuera.
Los monos se han apoderado del hotel. Están en las rejillas de ventilación, en los techos, en las paredes. Te observan todo el tiempo, esperando su momento. Saben que no hay dónde esconderse. No hay escapatoria. Estás atrapado en el hotel con los monos. Y los monos tienen hambre.